Magdalena Kaluza
Con Ganas
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Por Magdalena Kaluza
Estas manos, con sus arrugas y sus pecas
Con sus heridas y sus marcas
Estas manos cuentan los hechos del ayer
Siguen los caminos de las estrellas y rascan lo húmedo de la tierra
Creciendo al lado de la pitajaya y granada
Bajo toronja y limón persa
Con sus cicatrices cuentan los hechos del mañana
En lo liso de las uñas, con la tierra bien metida
Y en lo suave de los pelitos
En pedacitos de piel masticados buscando distracción
Con sus anillos de carisma, sus brazaletes de seguridad
Entre todas estas marcas, todos estos recuerdos
Ciertos resaltan
Ciertos regresan dia tras dia
Me acarician la nuca, murmurando palabras de cariño
Me masajean la panza cuando me duele
Me dan cosquillas para sacarme la risa
Y me aplaudan para inspirar enfoque y disciplina
Una de estas marcas está mojada con lodo, fragante con nutrientes
Lo siento entre mis dedos, bajo mis pies
Con ella aprendo de la plaza de Mayo
De las abuelas, Argentinas, con pañales, pañuelos, blancos
Una red de búsqueda, de encuentro, de raíz
Otras marcas, cicatrices color canela,
complejas con sus montañas y valles
Estas me hablan de Berta Cáceres, Hondureña,
Dice: “Hay resistencia en los barrios,
en la diversidad sexual,
en defensa de los bienes comunes y la naturaleza”
Me hablan también de Doña Máxima Acuña, Peruana,
enfrentando corporaciones multinacionales
para el bienestar de toditos nosotros
Las arrugas, las pecas, recuerdos de las abuelitas
Gritando la presencia de Rajasthan, en la India,
sus granjeras batallando Coca Cola
Batallando por las plantas, por la gente, y por la vida
Present con ellas, con nosotros,
Albertina Sisulu, Sudafricana,
inspiradora por la justicia racial.
Los callos, como cuero, lisos
Marcan nuestra luchadoras feroces
Las hermanas Mirabal, Dominicanas
Con su coraje, derrotando Trujillo
Gabriela Silang, Filipina
Líder de rebeldes indígenas
Quién luchó contra los españoles
Y miles y miles y miles y miles y miles más
Mujeres, mujeronas, amigonas, y hermanas
Compatriotas, compañeras, comandantes, comadres
Mujeres Oromo y mujeres Zapatistas
Ambas luchando por dignidad indígena
Hermanas Anishinaabe, defendiendonos todos
Contra el robo corporativo
Compas Ucranias, compas Franceses, compas Hong Kongeses,
Compas Afro americanas, compas Irlandesas, compas Palestinas, compas Tibetanas
Demostrando que JUNTAS, JUNTOS, JUNTES PODEMOS
Y la culpa no era mía, ni donde estaba, ni donde vestía
Y la culpa no era mía, ni donde estaba, ni donde vestía
Y la culpa no era mía, ni donde estaba, ni donde vestía
Wholeheartedly
By Magdalena Kaluza
These hands, with their wrinkles and their freckles
With their wounds and their marks
These hands tell of what was done yesterday
They follow the paths of the stars and scrape at the humid of the earth
Growing next to the dragonfruit and the pomegranate
Under the grapefruit and the Persian lime
Their scars tell of what was done in the morning
Under the smooth nail beds, earth deeply ingrained
Between the soft tiny hairs
In cuticles bitten, looking for distraction
With their rings for charisma, their bracelets for security
Between all of these marks, all of these memories
Some stand out
Some come back day after day
These hands caress my neck, murmuring kind words
They massage my belly when it hurts
They tickle me to make me laugh
And they clap to inspire focus and discipline
One of their marks is wet with mud, fragrant with nutrients
I feel it between my toes, under my feet
Through this mark I learn about the Plaza de Mayo
About the grandmothers, Argentine, with diapers, handkerchiefs, white
A search network, of meeting, of roots
Other marks, cinnamon-colored scars,
Complicated by mountains and valleys
These tell me of Berta Cáceres, Honduran,
They say: “There is resistance in the hood,
In sexual diversity,
In defense of the commons and of nature”
They tell me also of Doña Máxima Acuña, Peruvian,
Standing against multinational corporations
For the wellbeing of us all
The wrinkles, the freckles, memories of our grandmothers
Declaring the presence of Rajasthan, in India,
Its farms fighting Coca Cola
Fighting for the plants, for the people, for life
Present with them, with us,
Albertina Sisulu, South African,
Inspiration for racial justice.
The callouses, like leather, smooth
Mark our fierce warriors
The Mirabal sisters, Dominicans,
With their courage, defeating Trujillo,
Gabriela Silang, Filipina,
Leader of indigenous rebels
Who fought against the Spaniards
And thousands and thousands and thousands and thousands and thousands more
Women, tremendous, great friends, sisters
Compatriots, partners, commanders, godmothers
Oromo women and Zapatista women
All fighting for indigenous dignity
Anishinaabe sisters, defending us all
Against corporate theft
Ukrainian comrades, French comrades, Hong Kongese comrades,
Black comrades, Irish comrades, Palestinian comrades, Tibetan comrades,
Demonstrating that, TOGETHER, WE ALL CAN
And the fault wasn’t mine, nor where I was, nor how I dressed
And the fault wasn’t mine, nor where I was, nor how I dressed
And the fault wasn’t mine, nor where I was, nor how I dressed
About the Artist
Magdalena Kaluza (they/them) is a life-long gardener and bike rider, having learned a huge love for nature from both their parents. Magda also inherited a deep commitment to social justice. They spend much of their time organizing people power towards a world where life comes first, and where everyone’s needs are met. A Maya K’iche’ + Polish/French-Canadian queer punk, Magdalena was raised between Phillips, South Minneapolis and Guatemala. Magdalena loves cooking, dancing, playing with their partner & stepkid, and making poetry, puppetry, and art about a world healed and free. Click here to view their Instagram.
Sobre esta artista
Magdalena Kaluza (elle) ha practicado la jardinería y el ciclismo durante toda su vida, desarrollando así un inmenso amor por la naturaleza inculcado también por sus padres. Magda ha heredado un profundo sentido del compromiso por la justicia social. Ha pasado buena parte de su tiempo organizando empoderamientos que nos encaminen hacia un mundo donde la vida tenga un lugar prioritario, y donde se dé cabida a las necesidades de todos. Magdalena, Maya K’iche + Polaco/Francocanadiense queer y punk, creció entre Philips, Mineápolis Sur y Guatemala. A Magdalena le encanta cocinar, bailar, jugar con su pareja e hijastro, así como escribir poesía, crear marionetas y arte que reflejen un mundo sanado y feliz.